Mi primera experiencia con una bici de montaña fue en el verano del 2007, es decir, hace cuatro días. En aquella ocasión, con una bici y unas zapatillas prestadas (gracias Rafa) tomé la salida en el Triatlón Cross de Valsain en la sierra segoviana. No sé muy bien como salí indemne de aquel recorrido entre trialeras, piedras y árboles (incluso había que atravesar un pequeño río, donde lo más normal era no llegar a la otra orilla sin tener que bajar y mojarte los pies), pero sea como fuese desde el primer momento me di cuenta que la bici de montaña era muy diferente a la de carretera. Sin renegar de ésta, la de montaña aporta cosas y sensaciones muy distintas.
El otoño y el invierno pasado pude recobrar algunas de esas sensaciones de aquella primera experiencia, eso si, con mucho más barro, que lo hace más divertido aún. Le cogí tanto gusto a la bici de montaña que el mes pasado se anticipó el Weihnachtsmann (lo que vendría a ser en otras culturas Santa Claus) y dejó en mi casa una nueva amiga de dos ruedas.
Ahora, como no podía ser de otro modo, a parte de disfrutar de la nueva bici, toca hacer nuevos planes para ella. Una de las ideas es disputar algunas pruebas de triatlón con bici de montaña, lo que ahora llaman triatlón cross. Pero la idea estrella y que más nos motiva es realizar el proximo verano la Transalp. Una idea que agrada a más gente del grupo de triatlón con los que entrenamos, de manera, que quizá formemos un grupito para afrontar unos días de ciclismo en estado puro.
La transalp es una ruta que atraviesa los Alpes desde Alemanía hasta Italia. Existen muchas versiones y diferentes dificultades, pero la ruta clásica que es sobre la que se disputa la prueba ciclista Transalp Challenge, se inicia en Mittelwald en el sur de Alemania y pasa por Suiza y Austria hasta llegar a Rio de Garda en Italia. El recorrido tiene sobre 596 km y una desnivel de 19.500 metros en total. La competición consta de 8 étapas para completar el recorrido y en ella se dan cita muchos aficionados al ciclismo además de un buen número de ciclistas profesionales.
Nuestra idea es seguir este recorrido por nuestra cuenta e ir más tranquilos y poder disfrutar más de los paisajes, lugares y gente. De momento es una idea que este invierno habrá que dar forma para que el próximo verano sea una realidad. Os dejo un video para que os podais hacer una idea más precisa.
Por cierto, lo que se ve en el video no es el mar. Es un lago, pero muy grande.
Un saludo
2 comentarios:
¡Qué chulo! ¿pero no es un poco peligro? desde luego duro parece durçisimo.
Besos,
Bego
mucho ánimo a los dos!!
Menuda bici, ¿no? Bonita es. Ahora a ensuciarla entrenando duro, jajajaja
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